
A diferencia de los métodos anteriores, el cuadro de texto nos permite que insertemos un valor en él, como una expresión o un número.
Los más habituales son los que permiten valores numéricos y suelen tener a su lado dos botones con flechas para subir o bajar la cantidad indicada sin necesidad de escribir.
Cuando hay muchas opciones, éstas se pueden presentar de varias formas. Una de ellas son los cuadros de lista: todas las opciones aparecen en un cuadro con una barra de desplazamiento que nos permite movernos para verlas todas.
Una combinación muy habitual es la que se da entre los cuadros de texto y los cuadros de lista. Estas combinaciones se llaman cajas combinadas, y tienen un cuadro de texto para escribir el valor y una lista debajo en donde elegir cualquiera de los que se nos listan.
Estas cajas y los cuadros anteriores suelen tener la capacidad de coordinar el texto con la lista, de manera que si empezamos a escribir un valor de la lista, esta se desplazará hasta él.
Un ejemplo es en el cuadro que nos muestran las fuentes o tipos de letra. Si empezamos a escribir “Ari”, abajo la lista se desplazará hasta mostrarnos la primera fuente que empieza con esas letras: Arial.
Otra forma de presentar varias opciones es por medio de listas o menús desplegables. En un principio, sólo se puede ver una de las posibilidades a elegir, pero a su lado podemos ver una flecha que señala hacia abajo. Si hacemos clic ahí, aparecerán el resto de las opciones. Esto es aplicable también cuando encontramos iconos que tienen una flecha a su lado.